Mia es una adolescente a la que le gusta estar sola y que se aficiona a la sensación que le provoca el invocar espíritus. Para ello utiliza una mano embalsamada, algo que le traerá problemas. En una de las sesiones, se enfrenta a un ente que dice ser su madre, que falleció años atrás. Este contacto desatará una plaga de fuerzas sobrenaturales que consiguen que Mia se debata entre confiar en los muertos, o confiar en los vivos.

Cuando A24, responsables de películas de terror como Hereditary, Midsommar, La Bruja o Men, produce una nueva obra esta tiene, automáticamente, toda nuestra atención. Esto es lo que ocurrió con Háblame (Talk To me), cinta australiana dirigida por Danny Philippou y Michael Philippou y que cuenta con un reparto encabezado por Sophie Wilde.